Nutrición humana

La nutrición humana

   La nutrición es la ciencia que estudia la relación que existe entre los alimentos y la salud, especialmente en la determinación de una dieta.

   Una alimentación saludable consiste en ingerir una variedad de alimentos que brinden los nutrientes necesarios para mantenerse sano, sentirse bien y tener energía.

   Hay que tener una buena alimentación porque, de lo contrario, pueden aparecer problemas de salud en la edad adulta e incluso en la adolescencia. Por ejemplo, en los más jóvenes puede provocar caries y enfermedades de la alimentación como la bulimia y la anorexia.

   La bulimia es un trastorno que se caracteriza por períodos en que se come compulsivamente, seguidos de otros de culpabilidad y malestar, con provocación del vómito.

   La anorexia es un trastorno de origen neurótico que se caracteriza por un rechazo sistemático de los alimentos y que se observa generalmente en personas jóvenes; suele ir acompañado de vómitos provocados, adelgazamiento extremo y, en el caso de las mujeres, desaparición de la menstruación.

   La dieta es la cantidad de alimentos que un ser vivo necesita para vivir. Se asocia erróneamente a la práctica de restringir la ingesta de comida para obtener sólo los nutrientes y las energías necesarias,

y así conseguir o mantener cierto peso corporal.

   La dieta puede ser equilibrada o desequilibrada. Una dieta equilibrada es aquella que cubre los requerimientos energéticos, nutricionales y la necesidad de fibra y agua que necesita el cuerpo

humano, es decir, si los nutrientes cumplen sus funciones: la función energética, estructural y reguladora.

   Función energética: aportar la energía para el mantenimiento del cuerpo, decimos que

estos alimentos tienen función energética. Los nutrientes encargados de favorecer esta función son los lípidos e hidratos de carbono que encontramos en aceites, grasas y cereales.

  

   Por su parte, la función estructural: aportar los elementos formadores para el recambio y

crecimiento de sus estructuras biológicas. Decimos que estos alimentos tienen función plástica o estructural. Llevadas por proteínas, presentes en carne, huevos y pescados.

   Función reguladora: aportar las sustancias reguladoras, es decir, los nutrientes necesarios para el correcto funcionamiento del organismo; decimos que estos alimentos tienen función reguladora. Llevadas fundamentalmente por vitaminas y minerales donde encontramos: leche, verduras, frutas.

   

   Por lo tanto, para prevenir enfermedades y tener una buena alimentación hay que comer

sano y variado.